La ciudad parece ser uno de los cronotopos más utilizado en los últimos años. Ciudad rocanrol es eso, un homenaje a la ciudad y su locura. En la mayoría de relatos los personajes principales son “locos”, pero no esa locura vista como enfermedad mental sino como una variable poética en donde se vuelve una herramienta para apreciar los arcos de las viejas catedrales como lo hace la Dra. Fukuyama, o simplemente se sentarse en las viejas estaciones a observar el paso de los trenes que ya no existen, como en el extraño caso de la mujer desnuda, o en el peor de los casos, para escarparse del manicomio para ir al circo a enfrentar al león que comió a su madre, como en las anotaciones del Dr. Clint Eastwood.
La violencia como espectáculo también está presente en esta ciudad. El asesinato de prostitutas lo deja ver el Sargento Pimiento. El enfrentamiento violento en medio de disparos, está en manos de Los Perrones y el detective Malpaso, como un cortometraje que se desarrolla en “un maldito pueblo centroamericano donde todos somos actores de reparto, muertos y sin la promesa de ningún Oscar”.
Por otra parte, hay una constante en la obra de Berne Ayalá: el pasado. En su anterior novela Alta hora de la noche (2011), narraba de una manera casi fílmica, el asesinato de un gran poeta. En el relatoHace frio sin ti, pero se vive (tráiler de una novela prometida) aparece reiteradamente el asesinato de ese poeta que nuevamente queda pendiente de resolver, puesto que por orden presidencial es de mayor importancia investigar la desaparición de los animales del zoológico.
Lo bizarro, la ironía y sobre todo la nostalgia se hacen presentes en este relato, sobre todo cuando la madre del personaje recita los versos que su esposo le leía: “siempre recordaré tu desnudez entre mis manos, tu olor a disfrutada madera de sándalo clavada junto al sol de la mañana…”. En este caso es notable la intertextualidad del relato, pero será notable también en los demás componentes de la obra al entrar en diálogo con filmes, canciones, poemas, nombres de cantantes o personajes hollywoodenses.
En Ciudad Rocanrol usted encontrará desde una jirafa que pide canciones, el amor violento, la escala diez del rocanrol, peces de colores en manos de cadáveres, el asesinato del mesías a mano de policías, la actividad onírica de un loco con escafandra en busca de Cousteau y, las arañas bailando sobre un racimo de gerberas. Al final todo es puesto en escena en esa “maldita ciudad amada mía quince muertos me debes un dólar te debo un rocanrol”
Berne Ayalá ha escrito cuento, novela, testimonio, ensayo, reportaje, crónica y poesía. Entre sus publicaciones se encuentran El tope y más allá (1996) El murmullo de la ceiba enana (2003), Ángel para un final (2004), Las copas del castigo (2005), La Bitácora de Caín (2006), Arizona dreaming (2007), Entre Marilyn Monroe y la revolución (2010), Alta hora de la noche (2011).